AMORES PEREGRINOS.
Amores que se fueron,
que errantes me olvidaron,
regresan en silencio
por la desilusión.
Amores que se fueron,
acaso si me amaron,
tan solo rosas mustias
dejaron en su adiós.
Amores peregrinos,
hoy llegan nuevamente,
llegan por el camino
que mi llanto regó.
Y al sentir su llegada
los beso tiernamente,
pero no siente el alma
lo que una vez sintió.
Amores peregrinos
se arriman a mi hoguera,
en los que la quimera
aun quema con ardor.
Y huérfanos y fríos,
estos amores míos,
son un altar de sueños
que guarda el corazón.
Recuerdos del pasado
que me dejo el olvido,
porque Dios ha querido
que sintiera el dolor;
Que sienten los poetas
por lo que se ha perdido,
para escribir los versos
que se vuelven canción.
Los versos que mitigan
la sed de la amargura
y las tristezas hondas
consuelan con dulzura;
Plantando en los jardines
de sendas dolorosas,
con amor las semillas
de las futuras rosas.
Mi dolor se adormece
Y los recuerdos tristes,
de amores peregrinos…
¡Se vuelven mariposas!
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Fabio A. Pabón M.
CURANDERO TANGO.
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